“Once a mermaid, always a mermaid”

Capsula de audio para Sonia. MACBA

Pese a que lo pueda parecer, Weeki Wachee (pronúnciese uiqui uachi) no es un producto de la imaginación de Toni Hervás… es (o fue) realmente un pueblo pesquero entero remarquetizado como parque temático de Sirenas y, a la vez, una de las mayores canteras de extras de cine de sincronización acuática que produjo Hollywood. Lo que sí que es culpa de Toni Hervás es irse a Florida a acumular toda la documentación y tradición oral del lugar para luego llevarlo a su terreno: el fanzine que se sale de la página, la batallita que se convierte en dibujo figurativo, en blanco y negro si es autobirgráfica o en “los colores del pantano” si mezcla fantasía y mitología. Toni Hervás reivindica a través de la fotocopia y la marginalia en esteroides lo festivo como estrategia de resistencia comunitaria. Y siempre, con una sonrisa de lado a lado.
Aquí le tenéis:
http://rwm.macba.cat/es/sonia/antoni-hervas/capsula
Como escribió en una chupa de denim negro desgatada sin mangas: “Lo que niega el arte, lo da el azar”. Y con esto, os deseo buena escucha y un buen fin de semana!

Antoni Hervás se considera un trovador y siempre ha soñado con ser pinchadiscos de Bollywood. Educado en un colegio en el que una profesora visionaria quiso convertir a sus alumnos en una compañía de musicales, conocer su biografía es entender mejor su trabajo.
Su obra se identifica con el dibujo, un dibujo que él define como elástico y mutante, capaz de absorber y expandir otras disciplinas. A través de este medio documenta historias que parten de batallitas y de lo autobiográfico y que tienen la voluntad de convertirse en universales. Su metodología de trabajo pasa por la acumulación de datos y la investigación poco ortodoxa y en apariencia absurda. En sus proyectos las historias individuales y la memoria oral se mezclan con las tradiciones locales y la mitología clásica, en una histriónica mezcla de realidad, distorsión y ficción.
Pese a que estudió Bellas Artes, Antoni cuenta que su entrada en el mundo del arte fue por la puerta de atrás, distribuyendo sus fanzines en librerías. Siempre fiel al medio y a su espíritu amateur, Hervás acabó saliéndose de la fotocopia y los márgenes del papel, por lo que desde el cubo blanco se le vincula a la noción de fanzine expandido, aunque para él es simplemente una manifestación más de su carácter festivo, comunitario y potencial viral. Por ello insiste siempre que puede en devolver el fanzine a la calle, mediante talleres con niños y adultos en los que trabajo e investigación se desarrollan en paralelo.
SON[I]A habla con Antoni Hervás de atracos, de su abuela, de parques temáticos de sirenas, de Hércules, de fotocopias y de entender lo lúdico como un sistema de resistencia.

antoni-sonia